MENÚ DIARIO, MIÉRCOLES 01 DE JULIO - ANTE LA MALDAD ELIGE AMAR

 “Alégrate, siervo bueno y fiel. Entra a compartir el gozo de tu Señor”

(Mt 25,21)

ALIMENTO DEL DÍA:

Del libro del Génesis: 21, 5. 8-20

Abraham tenía cien años, cuando nació su hijo Isaac. Creció el niño y lo destetaron; ese día Abraham dio un gran banquete.

Sara vio jugando con su hijo Isaac al hijo que Agar, la egipcia, le había dado a Abraham, y le dijo a éste: “Despide a esa esclava y a su hijo, pues el hijo de esa esclava no va a compartir la herencia con mi hijo Isaac”.

Abraham lo sintió mucho, por tratarse de su hijo, pero Dios lo consoló, diciéndole: “No te aflijas ni por el niño ni por tu esclava. Hazle caso a Sara en lo que te dice, porque es Isaac quien continuará tu descendencia. Aunque al hijo de la esclava lo convertiré en un gran pueblo, por ser descendiente tuyo”.

Se levantó, pues, Abraham de mañana, tomó pan y un odre de agua y se lo puso a Agar en los hombros, le entregó al niño y la despidió. Ella se fue y anduvo errante por el desierto de Bersebá. Cuando se le acabó el agua, Agar dejó al niño bajo un matorral y fue a sentarse enfrente, a distancia como de un tiro de arco, pues decía: “No quiero ver morir al niño”.

Entonces el niño rompió a llorar y Dios oyó el llanto del niño. El ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo y le dijo: “¿Qué te pasa, Agar? No tengas miedo, porque Dios ha oído el llanto del niño que está ahí. Levántate, toma al niño y llévalo de la mano, porque voy a convertirlo en un gran pueblo”. Entonces Dios le abrió los ojos y vio un pozo con agua. Fue, llenó el odre y le dio a beber al niño. Dios asistió al niño, que creció, vivió en el desierto y llegó a ser un gran tirador de arco.

Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

Del salmo 33

R. El Señor escucha el clamor de los pobres.

El Señor escucha el clamor de los pobres y los libra de todas sus angustias. Junto a aquellos que temen al Señor el ángel del Señor acampa y los protege. R.

Que amen al Señor todos sus fieles, pues nada faltará a los que lo aman; el rico empobrece y pasa hambre; a quien busca al Señor, nada le falta. R.

Escúchame, hijo mío: voy a enseñarte cómo amar al Señor, para que puedas vivir y disfrutar la vida. R.

Del santo Evangelio según san Mateo: 8, 28-34

En aquel tiempo, cuando Jesús desembarcó en la otra orilla del lago, en tierra de los gadarenos, dos endemoniados salieron de entre los sepulcros y fueron a su encuentro. Eran tan feroces, que nadie se atrevía a pasar por aquel camino. Los endemoniados le gritaron a Jesús: “¿Qué quieres de nosotros, Hijo de Dios? ¿Acaso has venido hasta aquí para atormentarnos antes del tiempo señalado?”.

No lejos de ahí había una numerosa piara de cerdos que estaban comiendo. Los demonios le suplicaron a Jesús: “Si vienes a echarnos fuera, mándanos entrar en esos cerdos”. Él les respondió: “Está bien”.

Entonces los demonios salieron de los hombres, se metieron en los cerdos y toda la piara se precipitó en el lago por un despeñadero y los cerdos se ahogaron.

Los que cuidaban los cerdos huyeron hacia la ciudad a dar parte de todos aquellos acontecimientos y de lo sucedido a los endemoniados. Entonces salió toda la gente de la ciudad al encuentro de Jesús, y al verlo, le suplicaron que se fuera de su territorio.

Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.

VITAMINAS PARA EL ALMA

¿Te has preguntado alguna vez, por qué aquellas personas que obran de espaldas a Dios son salvadas hasta de sus propias iniquidades?

El controversial tema de este día, pudiera crear cierto descontento en aquellos que se dicen justos y perfectos, pues, en las líneas de las lecturas se puede leer sobre un Dios que tiene compasión de aquellos que usualmente, la sociedad descarta por sus obras desviadas.

En la primera lectura, vemos a un Dios bondadoso que tiene misericordia de una esclava y su hijo nacido fuera de matrimonio y a quien posteriormente convierte en el  padre de los árabes, Ismael. En la otra, Jesús el hijo de Dios, tiene compasión de unos demonios y les concede salir de unos hombres y entrar en unos cerdos.

Con esto te digo, que Dios siempre tiene misericordia de todos sus hijos, aun cuando bien conoce, que estos han elegido y siguen eligiendo opciones apartadas de la bendición. Son las personas las que escogen lo que les va a suceder. Sin embargo, el Padre Celestial siempre está allí, para ayudarlos incondicionalmente porque es amor perfecto.

Por tanto, antes de sentirte triste o amargado, porque una persona desviada del amor, le salen las cosas entre comillas bien, alégrate, pues, tienes a un Padre Bueno, que siempre favorece a todos sus hijos, independientemente, del modo de vida que escojan, ya que lo único que Él desea es que todos sin excepción andemos por caminos de paz y gozo y siempre lo dispondrá todo, para que así lo logremos...Feliz y bendecido Miércoles!

                                                               

POSTRE PARA EL ESPÍRITU

Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad y misericordia de mí, porque en algunas ocasiones he obrado contrario a tu voluntad, dejando de amar a quien obra en iniquidad. Por tu inmensa compasión, concédeme por Jesús, gozar de paz y gozo ante lo que yo crea que es injusto, para servirte fielmente en el amor que elijo disfrutar en todo aquel que se distancia de tu voluntad,  Gracias, Te amo…Amén!

“ANTE LA INIQUIDAD, MI MENTE Y CORAZÓN ELIGEN SIEMPRE AMAR”

Sé feliz y próspero, como tu Padre del Cielo lo desea.

 Que tú y tu familia sean bendecidos, protegidos y prosperados por Papá Dios, a lo largo de esta semana!