ORACIÓN DE AGRADECIMIENTO POR LAS BENDICIONES EN NUESTRAS VIDAS

(En actitud de agradecimiento al Padre del Cielo y sintiendo que hablas con Él, léelo muy lentamente, meditando)

Yo, obedezco diligentemente al Señor mi Dios y cumplo todos sus mandamientos y preceptos; por tanto, vienen sobre mí y los míos, todas estas bendiciones:

Bendito Dios gracias, porque somos benditos en las ciudades donde vivimos, en nuestros sitios de trabajos, en donde quiera que estemos, por donde quiera que andemos, en el campo y porque Tú Dios bueno, siempre nos das a disfrutar del fruto de su tierra y de su ganado.

Bendito Dios gracias, porque somos benditos en todas las áreas de nuestras vidas, mi esposo (a) y yo, nuestros hijos y todos los que desciendan de nosotros, nuestros Padres y hermanos.

Bendito Dios gracias, porque son benditos los estudios de nuestros hijos, nuestros empleos y trabajos, son benditas y prósperas nuestras finanzas, el fruto de nuestro trabajo, el aumento de nuestros salarios, nuestros ingresos adicionales, todos nuestros bienes se multiplican. Son benditas y prósperas, las alacenas y neveras de nuestras casas, nuestros closets, gaveteros y zapateros, nuestras carteras y monederos, nuestros ahorros y compromisos.

Bendito Dios gracias, porque somos benditos entrando y saliendo de cualquier lugar, son benditas nuestras acciones desde que amanece  hasta que anochece. Somos benditos, Rey nuestro, porque tú derrotas a todos los enemigos que se levantan contra nosotros, porque ningún arma forjada, veneno, contaminación, caos o desorden, hechicería o brujería, pobreza, deuda, escasez o ruina podrá alcanzarnos o prosperar contra nosotros; porque ninguna catástrofe natural o creada por el hombre, enfermedad, epidemia,  virus, hongo, bacteria, infección, dolor, aflicción y padecimiento, podrá alcanzarnos o prosperar contra nosotros; porque ninguna maldad humana o desconocida, chisme, habladuría o burla, persecución, acoso u hostigamiento, podrá alcanzarnos o prosperar contra nosotros, porque ningún ataque del mal de la forma que sea, podrá hacernos daño, porque EL SEÑOR YO SOY; DIOS Y REY NUESTRO  SIEMPRE LO DESHACE Y VENCE.

Bendito Dios gracias, porque son benditos nuestros espíritus, almas y cuerpos, estamos llenos de su Espíritu Santo y todos nuestros pensamientos, palabras y obras, son de Amor, paz y gozo, esperanza y fe, éxito y prosperidad, triunfos y victorias.

Bendito Dios gracias, porque son benditos nuestros cuerpos, están llenos de pureza, buena salud y equilibrio; sí nos enfermamos  EL SEÑOR YO SOY; DIOS Y REY NUESTRO, los sana pronto.

Bendito Dios gracias, porque somos benditos, porque siempre estás enviando tu santísima bendición en todo tiempo a nuestras casas, ahorros, bienes, empresas, emprendimientos, proyectos, trabajos, empleos, a todo lo que nuestras manos hacen, a todo lo que se gesta en nuestros pensamientos, a nuestra inteligencia.

Bendito Dios Gracias, porque son benditos y prósperos  nuestros hijos en las escuelas donde estudian, somos benditos y prósperos mi esposo (a) y yo en las empresas donde trabajamos, somos todos benditos y prósperos en las ciudades donde vivimos y en el país que habitamos.

Bendito Dios Gracias, porque somos benditos porque tú has formado de nosotros tu pueblo Santo, porque escuchamos tus mandamientos, los guardamos y cumplimos y seguimos tus pasos.

Padre Celestial Gracias, porque somos benditos, porque tu has abierto a mí y a mis amados, el cielo y sus ricos tesoros, para proveernos en todo tiempo manantiales de bendiciones a nuestras vidas, almas, espíritus, mentes, corazones, cuerpos, salud, empleos, trabajos, salarios, finanzas, bienes espirituales y materiales, proyectos y emprendimientos, estudios de nuestros hijos y el desempeño en donde trabajamos.

Padre Celestial Gracias, porque somos benditos, porque siempre seremos los primeros y nunca los últimos, siempre estaremos arriba y nunca abajo, porque nosotros cumplimos tus mandamientos, los guardamos y seguimos tus pasos.

Padre Celestial Gracias, porque somos benditos, porque con el poder de tu Espíritu Santo, nunca nos apartamos de tus palabras, ni a la derecha, ni a la izquierda, porque tu lo ordenas

Padre Celestial Gracias, porque somos benditos, porque tu formaste nuestras entrañas y nos tejiste en el vientre de nuestras madres.

Padre Celestial Gracias, porque somos benditos, porque en toda etapa y momento de nuestras vidas, tu has estado  allí, para ser nuestra herencia, protección y promesa, nuestra luz y salvación, nuestra roca y fortaleza, nuestra torre y refugio,  EL SEÑOR YO SOY; DIOS Y REY NUESTRO.

Padre Celestial Gracias, porque somos benditos, porque tú tomas control de nuestros miedos, penas, angustias y preocupaciones. Tomas control de todo aquello que se levante en contra de nosotros.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque tenemos ángeles buenos que nos resguardan y protegen  en todo lugar y momento,  que nos alejan de todo mal y nos iluminan los caminos de éxitos  y prosperidad.

Amado Yahvé gracias, porque soy bendita (o), porque tengo una esposo bueno, lleno de tu espíritu Santo, exitoso y próspero en todas las áreas de su vida, que me ama y me cuida.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos y prósperos desde el día que nacimos, porque tus nos elegiste para hacer cosas grandes.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque tenemos padres buenos llenos de tu Espíritu Santo, bendecidos  en todas las áreas de sus vidas, a través de los cuales tu nos provees toda clase de bendiciones a nosotros y a nuestras generaciones descendientes.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque nuestros hijos, nietos, bisnietos y todos los que desciendan de nosotros, siempre tendrán éxito y prosperidad  y ellos se harán famosos en medios de todos los pueblos, y todos verán que son una raza bendecida y favorecida por ti, mi Señor.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque nuestros hijos tienen maestros y profesores buenos, que los tratan muy bien; porque mi esposo (a) y yo, tenemos jefes buenos y benditos, que nos aprecian, que nos valoran y que siempre nos favorecen.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque tenemos Sabiduría, para conocer tu voluntad, para discernir entre el bien y el mal, para gobernar en nuestro hogar, para criar y educar a nuestros hijos bajo los valores de tus mandamientos y para ser feliz en este mundo.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque hemos tenido un encuentro personal con tu hijo Jesús, lo hemos aceptado como Señor y liberador  y estamos experimentando los frutos del espíritu Santo y la alegría de vivir y todos ven al Dios maravilloso que reina en nosotros.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque reconocemos que aquellos que nos persiguen, se burlan o hablan mal de nosotros, son piedras preciosas que nos ayudan a purificar, para estar dignos de ti, y así seguir recibiendo lluvias de bendiciones sobre nosotros y todos nuestros descendientes.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque en nuestro corazón sobreabunda tu amor y tus paz, para perdonar a todos los que se levanten contra nosotros.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque nuestra fe, basada en tu amor y en la esperanza que nos das, crece y se fortalece todos los días de nuestra vida.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque tenemos un carácter lleno de tu Sabiduría.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque vivimos en un país próspero, en donde todos oran a ti, se convierten, dejan su mala conducta y trabajan por la construcción de la paz, para que tengamos éxito y prosperidad.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque nuestros hijos estudian en escuelas bendecidas y protegidas por ti; porque mi esposo (a) y yo, trabajamos en empresas prósperas, protegidas  y favorecidas por ti.

Amado Yahvé gracias, porque yo, mi esposo (a), hijos, nietos y bisnietos, somos benditos, porque Tú, Rey Grande, nos provees feliz éxito en todos los momentos de nuestras vidas.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque reconocemos que el Papa, los obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, diáconos y laicos comprometidos, son la raza elegida por ti, para anunciar y proclamar la grandeza de tu reino.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque tu nos has liberado de la vida inútil, de las malas herencias generacionales, de toda maldición y atadura, de todo dolor y enfermedad, de todo peligro y extravío. Ahora somos felices y prósperos, porque somos verdaderamente libres, porque tú nos rescataste y sellaste con la sangre de Tu hijo Jesús nuestro Salvador.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque tu nos has escogido, como intercesores para llevar la esperanza a quienes la necesitan y nos vistes con ropas blancas, para orar día y noche, y  ofrendarte copas cargadas de perfumes que son las necesidades de nuestros prójimos.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque nuestros ojos ven la grandeza de tu gloria, nuestra alma solo piensa en ti y nuestra corazón se inclina a hacer tu voluntad.

Amado Yahvé gracias, porque somos benditos, porque Jesucristo es nuestro Salvador y su madre, La Virgen María, nuestra madrecita y principal ángel.

Yo, declaro, que todas estas bendiciones, se cumplen en mí, en mi esposo, en mis hijos y todos mis descendientes, en mis padres y hermanos, en mi comunidad y país. Y este es un gran día porque El Rey de los Cielos y la Tierra, YO SOY, todo lo puede y obra maravillas. Todo lo podemos en Cristo que nos fortalece. AMEN.