CONVERSANDO CON DIOS, MIÉRCOLES 29 DE MARZO - JESUS EL HIJO DE DIOS
ALIMENTO PARA EL ALMA
PRIMERA LECTURA
Te constituí como alianza para el pueblo, para restaurar la tierra.
Del libro del profeta Isaías: 49, 8-15
Esto dice el Señor: "En el tiempo de la misericordia te escuché, en
el día de la salvación te auxilié. Yo te formé y te he destinado para que seas
alianza del pueblo: para restaurar la tierra, para volver a ocupar los hogares
destruidos, para decir a los prisioneros: 'Salgan', y a los que están en
tinieblas: 'Vengan a la luz'. Pastarán de regreso a lo largo de todos los
caminos, hallarán pasto hasta en las dunas del desierto. No sufrirán hambre ni
sed, no los afligirá el sol ni el calor, porque el que tiene piedad de ellos
los conducirá a los manantiales. Convertiré en caminos todas las montañas y
pondrán terraplén a mis calzadas.
Miren: éstos vienen de lejos; aquéllos, del norte y del poniente, y
aquellos otros, de la tierra de Senim". Griten de alegría, cielos;
regocíjate, tierra; rompan a cantar, montañas, porque el Señor consuela a su
pueblo y tiene misericordia de los desamparados. "Sión había dicho: `El
Señor me ha abandonado, el Señor me tiene en el olvido'. ¿Puede acaso una madre
olvidarse de su criatura hasta dejar de enternecerse por el hijo de sus
entrañas? Aunque hubiera una madre que se olvidara, yo nunca me olvidaré de
ti", dice el Señor todopoderoso.
Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL
Del salmo 144, 8-9. 13cd-14. 17-18
R/. El Señor es compasivo y misericordioso.
El Señor es compasivo y misericordioso, lento para enojarse y generoso
para perdonar. Bueno es el Señor para con todos y su amor se extiende a todas
sus creaturas. R/.
El Señor es siempre fiel a sus palabras y bondadoso en todas sus
acciones. Da su apoyo el Señor al que tropieza y al agobiado alivia. R/.
Siempre es justo el Señor en sus designios y están llenas de amor todas
sus obras. No está lejos de aquellos que lo buscan; muy cerca está el Señor, de
quien lo invoca. R/.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 11, 25. 26
R/. Honor y gloria a ti, Señor Jesús.
Yo soy la resurrección y la vida, dice el Señor; el que cree en mí,
aunque haya muerto, vivirá. R/.
EVANGELIO
Como el Padre resucita a los muertos y les da vida, así el Hijo da la
vida a quien él quiere dársela.
Del santo Evangelio según san Juan: 5, 17-30
En aquel tiempo, Jesús dijo a los judíos (que lo perseguían por hacer
curaciones en sábado): "Mi Padre trabaja siempre y yo también
trabajo". Por eso los judíos buscaban con mayor empeño darle muerte, ya
que no sólo violaba el sábado, sino que llamaba Padre suyo a Dios, igualándose
así con Dios.
Entonces Jesús les habló en estos términos: "Yo les aseguro: El Hijo
no puede hacer nada por su cuenta y sólo hace lo que le ve hacer al Padre; lo
que hace el Padre también lo hace el Hijo. El Padre ama al Hijo y le manifiesta
todo lo que hace; le manifestará obras todavía mayores que éstas, para asombro
de ustedes. Así como el Padre resucita a los muertos y les da la vida, así
también el Hijo da la vida a quien él quiere dársela. El Padre no juzga a
nadie, porque todo juicio se lo ha dado al Hijo, para que todos honren al Hijo,
como honran al Padre. El que no honra al Hijo tampoco honra al Padre.
Yo les aseguro que, quien escucha mi palabra y cree en el que me envió,
tiene vida eterna y no será condenado en el juicio, porque ya pasó de la muerte
a la vida. Les aseguro que viene la hora, y ya está aquí, en que los muertos
oirán la voz del Hijo de Dios, y los que la hayan oído vivirán. Pues así como
el Padre tiene la vida en sí mismo, también le ha dado al Hijo tener la vida en
sí mismo; y le ha dado el poder de juzgar, porque es el Hijo del hombre.
No se asombren de esto, porque viene la hora en que todos los que yacen
en la tumba oirán mi voz y resucitarán: los que hicieron el bien para la vida;
los que hicieron el mal, para la condenación. Yo nada puedo hacer por mí mismo.
Según lo que oigo, juzgo; y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad,
sino la voluntad del que me envió".
Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús
CONVERSANDO
CON PAPÁ DIOS
Adorado
Padre Santo, Jesús el Nazareno, es tu encarnación en una sencilla mujer, la virgen María.
En otras palabras, Jesús, es la humanización de tu Amor Divino. Es por eso, que tiene potestad de salvar,
liberar, restaurar y hasta resucitar.
Jesús
no es fracción tuya como nosotros, los seres humanos. Jesús es el propio Espíritu
de Dios Padre engendrado en una humana, para ser humano. Por tal razón, es Dios
mismo en la figura de Hijo, porque se humanizó para estar entre los seres de
este mundo.
Sin
embargo, al estar entre seres semejantes, se deshizo de su condición divina
para igualarse, a fin de demostrar con su conducta, sus actitudes y sus
experiencias, el significado de la verdadera práctica del amor. En ningún momento
se distrajo con preocupaciones mundanas, sino que se ocupó de amar sin
distinciones y sin excepciones como el mismo Padre ama.
Por
consiguiente, quien le ama, ama al Padre; quien le sigue, sigue al Padre; quien le
escucha, escucha al Padre y quien le ve, ve al Padre. ¡Dichosos los hombres y
las mujeres que compartieron sus días! Dichosos los hombres y mujeres que
siguen su ejemplo, porque muchos
quisieron ver sus obras, que son las obras del Padre.
Es
por eso, que en su nombre te pido, que mi mente y mi corazón se abran a tu
amor, es decir a Jesús, para amarlo y aceptarlo profundamente, a objeto de amar sin
presunciones como Él lo hizo…Amén…BENDITO, ALABADO Y ADORADO DIOS NUESTRO!!!
Meditando:
¿Creo
que Jesús es el Hijo de Dios Padre?¿Mis obras de amor y bondad se parecen a las
suyas?
Tarea:
En
este día, elijo reconocer una y otra vez, que JESÚS es el Hijo de Dios.
“RECOCIENDO
A JESÚS COMO HIJO DE DIOS, RECONOZCO QUE MI MEJOR INSPIRACIÓN VIENE DEL AMOR”
Qué
La bendición del Padre, el amor del Hijo y la fuerza del Espíritu Santo te
acompañe y guíe tus pasos.
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