EL EXPERTO EN LIBERACIÓN

La gran mayoría de las personas piensan que Dios es una figura religiosa, mitológica y hasta legendaria, que debe ser usada únicamente en casos de emergencia. Pero se equivocan, Dios es Todopoderoso, es Omnisciente, Omnipotente y es el único dueño y soberano de este mundo. Que por allí anda alguien suelto haciendo de las suyas, es cierto. Sin embargo, eso no quiere decir que por tal razón, el innombrable sea dueño de esta humanidad. Lo verdaderamente importante es que Dios, como creador y Señor del universo tiene inherencia en todos los asuntos que conciernen al hombre y a su ambiente, aún cuando nos regaló el libre albedrío. 

En nuestro país, se celebrará dentro de dos días una nueva elección presidencial, que a mi parecer no sería necesaria, si la codicia, el orgullo, la ira, la envidia y la pereza   (Ojo: cinco de los siete pecados capitales), no hubiesen formado parte del escenario político-social actual. Es doloroso, observar cómo se dilapida tanto dinero y tiempo, cuando hay tantos asuntos de salud, economía  y educación por solventar. Lo cierto es que en aquella ocasión se hizo la voluntad de los hombres. Particularmente, deseo que esta vez se haga la voluntad de Dios.

Yavé nuestro Dios, es especialista en liberar pueblos de la esclavitud cuando sus sufrimientos llegan hasta él (Cf Éxodo 3,7), tal como lo hizo con sus escogidos, los hebreos al liberarlos de la opresión Egipcia (Cf Éxodo 12,37).  Es decir, que Dios, sí se inmiscuye en los asuntos políticos de cualquier nación. Somos nosotros quienes debemos dejar y aceptar que lo haga. Porque cuando lidera Yavé, la victoria es contundente. Nosotros debemos ser sus instrumentos de paz, de amor, de rectitud y de gozo.

Por otra parte, también es importante destacar que cada vez que practicamos la maldición, es decir, hablamos o deseamos mal, afirmamos con odio que las cosas están mal o nos burlamos de las equivocaciones (olvidándonos que también nos equivocamos), le otorgamos poder a quien represente el mal. Es por eso, que a través de la historia de la humanidad, tantos anticristianos han gobernado naciones, porque si sumamos la fe de sus seguidores más la fe de aquellos que no los siguen, se hace un gran total. No obstante, la fe que agrada a Dios, esa que está basada en su amor y esperanza, es más poderosa, porque tiene la esencia de Dios impresa. Los gobiernos del rey David, del rey Salomón o el liderazgo de Gandhi, son muestras de ello.

Entonces, para concluir, Dios y su Iglesia, si intervienen en la política. Y por otra parte, antes de votar, pide a Dios que te llene de sabiduría y discernimiento a ti y a todo el pueblo venezolano, para que nuestro futuro cercano lleno de amor y progreso sea la muestra exquisita de la mano de Dios conduciendo un país. Soy Venezolana!

Bendito seas…Un beso,

Zarina Lucena